jueves, 3 de marzo de 2011

txantxikuarra

TXANTXIKU = RANA EN EUSKERA, Y SU RELACIÓN CON LOS OÑATIARRAS
Oñati durante siglos fue un Señorío y después un condado, que no pertenecía a provincia ninguna, simplemente era su dueño una serie de familias que tenían todo el poder en todos los aspectos. Y los pobres habitantes del pueblo no tenían ningún derecho, solo obligaciones de sembrar la cosecha y trabajar para su Señor Jaun . Los derechos que tenia el Jaun , llegaban hasta que las mozas que pretendían casarse, antes, la primera noche de bodas la tenían que pasar con el dichoso Jaun .

Pero la leyenda cuenta, que el Jaun tenia costumbre de dormir la siesta en verano, y como en Oñati hay muchas ranas txantxikus , estas croaban constantemente, lo cual incomodaba al Jaun . Por lo que mandó que todas las tardes, todos los habitantes del pueblo, armados con un palo se dedicaran a silenciar a las ranas. Pero el sentimiento interno de todos los del pueblo estaba con las ranas, ya que ellos no podían fastidiar al Jaun, pero los txantxikus sí, por lo que los habitantes se identificaban con los txantxikus. Por esto, es de tradición que nos llamen a todos los de Oñati: Txantxikus.

Hay otra leyenda parecida, en el que el Señor Conde estaba en su palacio rodeado de sus amigos, y el suelo del palacio estaba embaldosado con baldosas blancas y negras, como si fuera un tablero de ajedrez. Los habitantes del pueblo, eran gente sencilla, que normalmente solían andar con calzado lleno de barro, debido a su duro trabajo en el campo. Pues bien, unos del pueblo pidieron audiencia para hablar con el Señor Conde, este le dijo que se acercaran pero solo pisando las baldosas negras, para que sus pisadas no ensuciaran las baldosas blancas. Cuando los del pueblo comenzaron a saltar por las baldosas negras, el conde soltó ante sus amigos,-- mirad estos son mis txantxikus --.

Tras esto, los de los pueblos de alrededor comenzaron a burlarse de los de Oñati, llamándoles Txantxikus, y con este nombre nos hemos quedado, con el apodo de txantxikus. Hoy en día lo llevamos con mucho orgullo.


jueves, 21 de abril de 2005 a las 0:00



UN POCO DE LA HISTORIA DE OÑATI

UN POCO DE LA HISTORIA DE OÑATI
Oñati es, en la panorámica histórica de Guipúzkoa, a la que pertenece de pleno derecho desde mediados del siglo XIX, algo especial; fue una de las pocas villas de señorío que existieron en Euskadi. Enclavada casi en el corazón de la Euskadi peninsular, ocupa un hermoso valle rodeado por todas partes de verdes montañas, menos por el sur, donde señorea la caliza mole del Aloña (1.324 m.). Oñati significa en euskera: "lugar abundante en colinas", lo que cuadra admirablemente con lo que contempla su visitante.

Oñati fue durante siglos señorío y más tarde condado. Esto presupone que el señor tenía sobre el pueblo una serie de derechos, que sus moradores tuvieron que aguantar a regañadientes. El sistema político imperante en aquellos tiempos se traducía en que el señor o conde de Oñati era la máxima autoridad: cobraba los impuestos tanto civiles como eclesiásticos, nombraba al alcalde y al abad de la iglesia, ejercía la justicia, mandaba las tropas que en tiempo de guerra se reclutaban etc. La familia de los Vela primero, y más tarde los Guevara, disfrutaron de estos derechos señoriales. Su morada habitual era el castillo de Guevara, en Araba, al otro lado de los montes de Artía, límite de Oñati con ese territorio. Símbolo del poderío de los condes era la torre de Zumelzegui, que se conserva todavía como muestra de las más primitivas torres medievales de banderizos. Parece datar del siglo XIV y se levanta sobre un altozano dominando el casco urbano de la villa.

Los oñatiarras fueron siempre díscolos y lucharon contra su señor con las pocas armas que poseían. La historia de Oñati desde que se tiene noticias hasta el siglo XVII es una lucha continua para emanciparse del poder condal. Históricamente sabemos que en 1.389 hubo una revuelta en pro de mayores libertades. El fracaso fue total, pero las reivindicaciones se mantuvieron. En el siglo XV consiguieron que el alcalde se nombrase por votación, si bien el conde se reservaba la facultad de confirmar el alcalde ordinario electo por el pueblo, y seguía nombrando otro alcalde, el mayor.

La verdadera contienda contra el conde comenzó en el siglo XVI y en ella participaron el concejo y el cabildo eclesiástico. Cuando se convencieron que los enfrentamientos más o menos violentos servían de poco, optaron por la vía legal, y a partir de 1.540, cuestionaron ante las más altas instancias los derechos señoriales, exigiendo que la villa fuese realenga, lo que significaba incorporarse a Guipúzcoa y disfrutar de sus fueros.

Este pleito duró hasta 1.652 y lo perdió el pueblo. sin embargo, las ideas políticas iban evolucionando, y los Guevara ascendiendo en categoría en la Corte, lo que se tradujo en un alejamiento y dejación de sus derechos. Y llega el XVIII. las corrientes antiseñoriales de la nueva dinastía reinante hicieron que sin necesidad de nuevos pleitos , el Concejo de Oñati fuese consolidándose.

DEMOGRAFÍA


Según los datos del año 2.000, el número de habitantes de Oñati era de 10.748 personas, lo que supone un incremento en comparación con los datos del año 1996.



DATOS DEL AÑO 2000 HOMBRES MUJERES TOTAL
0-16 AÑOS 786 718 1504
17-24 AÑOS 560 578 1138
25-45 AÑOS 1805 1704 3509
46-64 AÑOS 1334 1215 2549
>65 AÑOS 900 1148 2048


El municipio de Oñati tiene una extensión de 108,2 km2 y se encuentra a 231 m de altitud.

Debido al desarrollo cooperativo y movimiento industrial que tuvo lugar en Oñati, el sector industrial adquiere un claro protagonismo en la clasificación de datos relativos al empleo por sectores económicos.

Si bien el desarrollo industrial ha ejercido una influencia decisiva en el sector primario, Oñati cuenta con una superficie que ronda las 10.000 hectáreas, la mitad de las cuales está dedicada a la ganadería. La actividad ganadera se ha basado principalmente en la explotación de ganado ovino y vacuno. También son abundantes las tierras que se utilizan para la explotación forestal.

Por otra parte, el 60% de la población trabaja en el sector industrial y la tasa de desempleo es muy baja.

Si bien la actividad comercial de la villa se basa en el mercado local, Oñati presenta una gran oferta de cocina. La mayoría de los servicios de hostelería son negocios familiares y ofrecen una cocina tradicional para la que utilizan productos de calidad a precios competitivos. En cuanto a la hospedería se refiere, Oñati cuenta con la oferta más amplia del Alto Deba.

Pero en Oñati es de resaltar la riqueza natural, que incluye la sierra de Aloña, la crestería de Aizkorri, el fenómeno kárstico de Gesaltza-Arrikrutz, etc., donde los amantes de las actividades al aire libre pueden practicar actividades como el senderismo, la escalada, el puenting, la espeleología, el parapente, etc. Una zona de gran valor natural y de gran riqueza faunística.

Posee múltiples recursos culturales, históricos y de patrimonio, cuenta con una amplia oferta gastronómica y una gran tradición para el turismo religioso. El folclore, las fiestas y costumbres de Oñati son muy importantes desde el punto de vista tanto cultural como estético.

jueves, 21 de abril de 0005 a las 0:00

Fotos y enlaces


Oñati fachada del ayuntamiento.






Iglesia de San Miguel Arcángel. 

La Iglesia de San Miguel Arcángel es un templo católico situado en la localidad guipúzcoana de Oñate, en el País Vasco (España). Guarda en su interior un retablo renacentista, el de la Piedad, que está considerado como de los mejores del País Vasco y tiene adosado un curioso claustro por cuyo patio interior pasa el río. 
[editar] Historia
El templo original data del siglo XIII y constaba de una única nave. En el siglo XV se añadieron otras dos naves quedando a central más elevada que las laterales, esta obra fue impulsada por los Señores de Oñate. En el siglo XVI el obispo oñatiarra Rodrigo Mercado de Zuazola, construye el claustro, reforma la capilla de la Piedad para destinarla a su mausoleo y la dota del retablo renacentista. En el siglo XV se hizo la cripta, para dejar libre el espacio de la capilla de la Piedad, y ya en el siglo XVIII la portada principal, el retablo mayor el arco del coro, ambos barrocos. Antes de finalizar ese siglo se añadió la torre neoclásica.
Bien de Interés Cultural (BIC), es Monumento Histórico-Artístico Nacional desde 1931.

Descripción

Se trata de un templo gótico de tres naves, la central más alta que las laterales. Las naves están separadas por grandes pilares cilíndricos, apoyándose las laterales en arbotantes. La eliminación de los muros divisorios despeja el volumen del edificio, que queda configurado como una iglesia de tipo salón. En el primer tramo de la nave central, sostenido por amplio arco carpanel, se halla el coro, con sillería y órgano. Las bóvedas que cubren el alzado son de crucería con plementería enjalbegada. Anexo a la nave de la nave sur se sitúa el claustro, realizado en estilo gótico flamígero cuya calle anexa a la iglesia ha sido integrada como cuarta nave de la misma.
El altar está elevado y se accede a él mediante un gran escalinata, debajo de él se sitúa la cripta que se construyó, elevando el altar mayor, para dar cobijo a los enterramientos de los familiares de Pedro Vélez de Guevara, Señor de Oñate, cuando este vendió los derecho de la capilla que los acogía a Rodrigo Mercado de Zuazola, quien levantó el púlpito renacentista, edificó la Capilla de la Piedad y construyó el claustro.
La torre es neoclásica y esta realizada en piedra caliza gris clara contrastando con la obra del resto del edifico, es obra de Martín Carrera. Es de destacar el acabado escultórico en los ángulos del entablamiento del campanario, donde se sitúan cuatro grandes bultos de cuerpo entero de los Padres de la Iglesia de Occidente.

Retablo mayor barroco Pedro Vélez de Guevara mando levantar una cripta para que fuera el lugar de enterramiento de sus familiares. Esta cripta se realizó elevando el altar mayor. Por ello fue preciso la construcción de un nuevo retablo. Esta obra se encargó a Juan Bautista de Soto y es un gran retablo barroco muy exuberante, con columnas salomónicas, frutos, angelotes y los santos patronos de la villa: San Miguel, San Sebastián y San Roque.





En la cripta que se construyó debajo del altar se realizaron una serie de nichos en las paredes para la ubicación de los diferentes enterramientos, mientras que en la pared este se ubica un pequeño altar. A mediados del siglo XX se trasladó a ella, situándolo en la mitad de la misma, el sepulcro gótico en alabastro de Don Pedro Vélez de Guevara, Señor de Oñate (título que a la postre sería de Conde de Oñate), fallecido en 1455. Esta es su cuarta ubicación: primitivamente estuvo en el centro la capilla a la derecha del altar mayor, la Capilla del Rosario, para pasar luego a ocupar, primero, el lado izquierdo, y más tarde, el lado derecho de la misma.






Sepulcro del Obispo Rodrigo Mercado de Zuazola, Capilla de la Piedad, Iglesia de San Miguel Arcángel, Oñate, Guipúzcoa. El mausoleo del que fuera Presidente de la Chancillería de Granada, el Obispo Rodrigo Mercado de Zuazola es obra del Arquitecto y escultor Diego de Siloé.

El sepulcro está embutido en la pared, se halla el mausoleo realizado también en estilo plateresco y atribuido a Diego de Siloé. El tema principal es la figura del propio obispo rezando y asistido por una virtud. La capilla se cierra con una verja de hierro forjado. En el retablo figura en sus lados el escudo de armas de Rodrigo Mercado de Zuazola, en del lado izquierdo está perdido.


Un gran retablo plateresco, el de las mejores obras de ese estilo del País Vasco, preside la capilla funeraria del obispo Rodrigo Mercado de Zuazola (1460?-1548). Este retablo, obra del francés Pierres Picart, está plagado de imágenes que hacen referencia a la Pasión, la vida de la Virgen, santos, profetas y angelotes.
A su lado, embutido en la pared, se halla el mausoleo realizado también en estilo plateresco y atribuido a Diego de Siloé.[1] El tema principal es la figura del propio obispo rezando y asistido por una virtud. La capilla se cierra con una verja de hierro forjado.
En el retablo figura en sus lados el escudo de armas de Rodrigo Mercado de Zuazola, en del lado izquierdo está perdido.

La capilla de la Piedad fue construida a partir de 1530-1531 a expensas de Don Rodrigo Mercado de Zuazola.
Se accede a la capilla a través de una reja de 7 metros se ancho por 8 de alto, y su tema central es una escena de la Piedad. En el lado del presbiterio hay una segunda reja de 3.85 metros de ancho por 8 de alto, muy parecida en su estructura, riqueza ornamental y calados a la anterior. En ellas se puede leer la fecha de 1535.
En su interior, el muro norte aparece cubierto por el mausoleo del obispo Zuazola, construido en mármol de Filabres antes de 1532 y cuyo autor parece ser Diego de Siloé, aunque no hay documentos que respalden esta autoría.
Detalles del Retablo El mausoleo está ordenado arquitectónicamente a modo de retablo. En el nicho central nos encontramos con el grupo escultórico de Don Rodrigo orante, asistido por una virtud y acompañado de un servidor, que tiene como fondo el relieve del Espíritu Santo entre nubes y ángeles.
El retablo de la Piedad ocupa la cabecera de la capilla. De estilo plateresco, se realizó según la documentación existente, entre 1533 y 1536. En la obra intervinieron los escultores vecinos de Oñate, Martín de Iragorri y Juan de Olazaren, y Andrés de Mendiguren y Juan de Ayala. Consta de banco, tres cuerpos y ático, en cinco calles, todo en relieve.
Frente al mausoleo está el sepulcro de Don Rodrigo, encargado a Pierres Picart. Contrasta en su sencillez con el retablo y el mausoleo, pues sólo consta de un sarcófago sostenido por un pilar cuadrangular con basa y plinto y tres angelotes en el capitel. En una cartela se puede leer la fecha de 1548.







Distintas tomas fotograficas de la torre campanario adosada a la parroquia.

La torre es neoclásica y esta realizada en piedra caliza gris clara contrastando con la obra del resto del edifico, es obra de Martín Carrera.

 


 

 





Claustro
Mandado construir por el obispo Rodrigo Mercado de Zuazola para ser utilizado como calle procesional es una bella muestra del estilo gótico flamígero de principios del siglo XVI. Llama la atención la decoración monotemática en base al escudo de armas de Rodrigo Mercado de Zuazola, bien como escudo entero o tomando el motivo del sol que aparece en el mismo. Esta decoración no solo está en las crucetas de los nervios de la bóveda sino que se repite en cada mésula y en los lienzos de pared del exterior. Las crujías se abren a anchos ventanales apuntados con trasdoses coronados por festones conopiales decorados con cardinas e intradoses consistentes en tríos de maineles y tímpanos calados, que separan pilastras con decoración vegetal; sobre las cornisas, cresterías, gárgolas, pináculos y remates de cogollos.
El claustro se construyó sobre el río Ubao, los lados este y oeste están realizados sobre puentes dejando pasar el río al centro de lo que debiera haber sido el patio. Esta curiosidad lo hace único en España.[1
Conjunto de imagenes que se sacan en la procesión del Corpus Cristi, expuestas en al claustro. 


Imágenes utilizadas en la procesión del Corpus Cristi. En la actualidad están expuestas en el claustro de la parroquia del San Miguel Arcangel.

Virgen de Aránzazu. Patrona de Gipuzkoa.



MIGUEL DE AOZARAZA, español, sacerdote dominico. Natural de Oñate (Guipúzcoa), ingresa como dominico en la provincia de España y posteriormente se pasa a la Provincia del Rosario. En Filipinas trabaja en la Misión de Bataan (Luzón). Refutó apostatar de su fe y aceptó con alegría tremendos suplicios. Edad, 39 años


San Crispin y  San Crispinian


Patronos de los zapateros.




San Miguel Arcangel.

Patrono de Oñati.


Niño Jesús de Praga


Mascara utilizada por San Miguel y los apostoles en la procesión del  Corpus






Imágenes del Monasterio de Bidaurreta

Juan López de Lazarraga, contador de los Reyes Católicos, y su esposa Juana de Gamboa querían un lugar adecuado para sus sepulcros, por lo que mandaron construir este monasterio a principios del siglo XVI.

En él se pueden apreciar tres estilos artísticos: gótico, mudejar y renacentista, aunque es éste último el que prevalece. Cabe destacar los dos retablos de la iglesia. Uno de ellos, el de la coronación de la Virgen, es de estilo barroco y fue realizado en madera no policromada. El otro es de estilo plateresco, uno de los primeros retablos renacentistas del territorio.

El monasterio está habitado por monjas de clausura de la orden de las Clarisas Franciscanas, por lo que únicamente está permitido el acceso a la iglesia.

La iglesia es de planta de cruz latina, con nave de tres tramos, brazo transversal o transepto, crucero y cabecera de tres paños. Las bóvedas de los tramos son de crucería compleja con terceletes. El tramo anterior cubre el coro alto, que posee sotocoro también abovedado. Adosadas a la nave longitudinal hay cinco capillas laterales de menor altura que aquella e igual anchura que el brazo transversal, por lo que exteriormente el templo da la sensación de ser rectangular. El transepto y las capillas alojan varios retablos e imágenes de época barroca. El acceso al templo se hace por su hastial occidental, donde el vano no es más que una sencilla puerta adintelada. En la fachada norte existe una portada tardogótica con tímpano y decoración escultórica que da acceso a una de las capillas laterales del lado del Evangelio.
Confluyen en el edificio tres estilos. El gótico isabelino se aprecia sobre todo en los lienzos exteriores, decorados a base de escudos con los emblemas de los Reyes Católicos sostenidos por águilas y cornisas con doble festón de bolas. El renacentista está presente en el austero sepulcro de los fundadores y en el retablo plateresco de dos cuerpos, fechado en 1533 y obra del tallista oñatiarra Juan de Olazaran, que cronológicamente puede ser el primero renacentista de Guipúzcoa. Ambos elementos se ubican en el brazo norte del transepto. Y el mujéjar, cuyos elementos característicos asoman en el claustro y en el artesonado del refectorio, los cuales forman parte de la clausura.
El retablo mayor de la iglesia es de un suntuoso estilo barroco en transición al rococó, realizado entre 1751 y 1753, con mazonería sin dorar, lo que brinda un fondo oscuro sobre el que contrastan gran número de tallas policromadas de santos y una coronación de la Virgen entre el Padre y el Hijo, conformando una escenografía muy dinámica y efectista. Como curiosidad, en 2008 se encontró en Bidaurreta el plano más antiguo de la Catedral de Sevilla.[1






Vista de la plaza del pueblo desde el lateral de la paroquia.






 
  
 

Las obras monumentales se explican en ocasiones por la personalidad de sus impulsores tanto como por la de los artistas que les dieron forma; es el caso de la Universidad Sancti Spiritus, concebida y costeada por el obispo oñatiarra Rodrigo Mercado de Zuazola, humanista de amplia formación.
Sancti Spiritus Unibertsitatea, Oñati 
Zuazola decidió fundar una institución universitaria que formara letrados de Oñati y "de toda la tierra vascongada". En esta obra, que precavidamente colocó bajo el patronazgo del emperador Carlos I, puso todo su afán y fortuna. La Universidad funcionó desde 1542 hasta 1901, impartiendo los grados de Teología, Cánones, Leyes y esporádicamente Medicina. El edificio constaba de patio central, planta baja y planta primera. La fachada, cuyo plan iconográfico plantea al estudiante la necesidad de ejercitarse en valores y virtudes que resultan de la síntesis pagana y cristiana, merece ser contemplada detenidamente.
En el interior de la Universidad destacan el claustro con su doble arquería, en cuyas enjutas se ubican 32 tondos ilustrados por parejas de cabezas históricas y mitológicas, los artesanados mudéjares, especialmente el magistral de la escalera de acceso a la primera planta, labrados por un tallista abulense llamado Gibaja y por último, el retablo plateresco de la capilla, tallado por Pierres Picart.








Imágenes de la procesión del Corpus Christi

Día de gran solemnidad. Tradición, religiosidad y danza se funden en la peculiar procesión que, tras la misa, recorre las calles del pueblo. Excepcional rito religioso-folclórico, cuyas primeras noticias datan del siglo XVI.
Oñati mantiene viva esta fiesta que cuenta con más de 500 años de historia. La Víspera y antevíspera de la celebración del Corpus, los dantzariak recorren las calles y los barrios de la Villa bailando y haciendo cuestación. El día del Habeas, antes de iniciarse la procesión, reciben uno a uno, a los diferentes pasos que tomaran parte en la misma, luego van a la búsqueda del paso viviente de San Miguel que junto con los doce Apóstoles, provistos de máscaras, constituyen la parte central de la procesión. Los dantzariak recorren las calles bailando durante todo el recorrido procesional. Bailan ante los pasos, ante los pequeños altares del camino, ante el paso viviente de San Miguel y lo hacen haciendo sonar sus castañuelas continuamente. Una vez dentro de la Iglesia y antes de la Consagración bailan nuevamente ante el Altísimo.
Por la tarde, en la plaza, representan el ciclo completo de danzas de "Korpus Dantzak": San Sebastianen Dantza, Banako Makil Dantza, Launako Makil Dantza, Zortziko Makil Dantza y Arku Dantza. Terminado el ciclo se baila un Aurresku.
Los dantzaris visten, además de pantalón y camisa blancas, unas faldillas o sayuelas rojas llamadas valencianas y banda y corbata rojas.
PROGRAMA:
  • A las 09:00 horas: Diana a cargo de la Banda de Txistularis.
  • A las 10:00 horas: Diana a cargo de la Banda de Música.
  • A las 10:00 horas: Llegada de las Imágenes de la Procesión a la Parroquia de San Miguel.
  • A las 10:45 horas: Llegada de la Corporación y la imagen de San Miguel a la Parroquia de San Miguel.
  • A las 11:00 horas: En la Parroquia, Misa Mayor.
  • A continuación: Procesión del Corpus Cristi por las principales calles de la villa.
  • A las 13:30 horas: Tras la procesión, concierto de la Banda de Música. 

Se acerca el 3 de junio, día del Corpus Christi, una jornada celebrada en muchos sitios de España como auténtica fiesta local. Uno de estos lugares es la villa guipuzcoana de Oñate, donde los festejos empiezan el jueves y duran hasta el domingo.
La festividad del Korpus en Oñati, por utilizar la denominación vasca, se remonta a cinco siglos atrás. Las primeras manifestaciones documentales aparecen en 1541 y la participación de danzantes, gitanos al parecer, en 1560. Eran tiempos en que los cascabeles se imponían sobre las castañuelas y predominaba el sonido de la pólvora al estallar, bien en las andanadas de arcabucería, bien en el lanzamiento de cohetes.
Pero el sentido del Corpus Christi era la exaltación de la Eucaristía, según la visión que tuvo la beata Juliana del Monte Comillón en la Europa norteña medieval, plasmada en la elección del primer domingo después de Pentecostés; los espectáculos vinieron más tarde, ya en el siglo XV. Por eso los bailes de los dantzariak por las calles de Oñate durante la víspera y la antevíspera no son más que el prólogo a lo que traerá el día grande de Habeas, el domingo.
Grupos de txistularis y bandas de música despiertan a los vecinos en la diana para convocarlos a la Misa Mayor, a cuya salida se inicia la procesión que caracteriza los festejos. Está compuesta por algunas agrupaciones destacadas. Una es la Cofradía del Santísimo Sacramento, con sus cofrades caminando tras el pendón ataviados con capas pardas y portando velones; otro la del Apostolado, con los doce apóstoles interpretados por los hermanos con máscaras de cada personaje (además de los discípulos están Jesús, María y San Miguel); y la de San Miguel, que al fin y al cabo es el patrón de la parroquia.

Corpus Christi Oñate
Pero el elemento más destacado es el grupo de danza, formado por ocho dantzaris capitaneados por un maixu y acompañados de cuatro txitularis y un abanderado. Los dantzaris visten pantalón y camisa blancas, con corbata, banda, boina y valenciana (sayuela) coloradas, salvo el capitán que cambia el rojo por el azul. Bailan todo el camino, con palos y castañuelas, ante los pasos, pequeños altares callejeros y el altar de la iglesia. Por la tarde, en la Plaza Mayor (salvo que llueva, en cuyo caso se trasladan al polideportivo), interpretan el ciclo completo de danzas, lo que se llama el Korpus Dantzak: San Sebastián, Banako Makil, Launako Makil, Zartziko Makil, Arku y Aurresku. La asistencia de público durante la jornada es masiva, por lo que conviene reservar hotel si se quiere verlo en directo.
El Corpus Christi de Oñate se completa con otro tipo de diversiones más mundanas para todas las edades, desde el tiro al plato en Txopekua a las típicas barracas, pasando por los gigantes y cabezudos o los conciertos y bailes populares en la Plaza de los Fueros a última hora de la tarde.













Camino de Urbia 
 La sierra de Aizkorri-Aratz alberga las más altas cumbres de la divisoria de aguas cántabro-mediterránea (Aitxuri 1.551 m), así como otras que conforman un macizo de gran atractivo y un punto de referencia para el montañismo vasco. Declarado parque natural en 2006, este área comprende unas 16.000 hectáreas, de las cuales 13.000 corresponden a Gipuzkoa y 3.000 a Álava.

Desde el punto de vista geológico y paisajístico se distinguen netamente dos zonas: las abruptas y rocosas crestas calizas, que pueden incluir llanuras de pastos en el valle como Urbia, y los encadenamientos de lomas y collados silíceos cubiertos de vegetación y dejando apenas ver la roca.

En el primer caso tenemos el alto cresterío de Aloña-Aizkorri-Aratz, importantísimo hito en el paisaje, tanto en su vertiente guipuzcoana como alavesa. Para comprobarlos, no hay más que situarse, por ejemplo, en el valle de Oñati, o recorrer la carretera N-1 por Idiazabal-Etxegarate y la Llanada alavesa. En el segundo, la larga y suave cresta de Urkilla-Elgea, visible toda ella desde las carreteras de la Llanada. En las cumbres de esta última se instaló el primer polígono de producción de energía eólica de la Comunidad Autónoma Vasca.

Desde Arantzazu (Oñati), situado sobre el barranco del mismo nombre y con su magnífico Santuario, por sendos caminos montañeros llegaremos a los pastos de Urbia (con refugio y ermita), que se halla al pie del tramo más alto de la sierra. Desde Araia, podemos subir a la cumbre de Aratz (1.443 m) y realizar recorridos en diversas direcciones, mientras que en Aretxabaleta y Eskoriatza nos hallamos al pie de Kurutzeberri (1.146 m), peña caliza que destaca en el tramo más occidental (Sierra Zaraia).

Por otro lado, tres de los ríos guipuzcoanos, Deba, Urola y Oria, nacen en las estribaciones de este conjunto de montañas. Por la vertiente alavesa, las aguas alimentan el curso alto del Zadorra (y el embalse del mismo) y del Arakil, que fluye hacia Navarra.

Como en todas nuestras montañas calizas, los fenómenos kársticos son notables. Citemos los campos de lapiaz, torcas, dolinas y numerosísimas cuevas, algunas muy visitadas como La Leze en Eguino. Muchas contienen yacimientos prehistóricos y paleontológicos, como Arrikrutz y Aizkirri, con restos de león y oso de las cavernas. La sierra es, además, parte del Camino de Santiago y en algunas zonas aún se conserva la antigua calzada.

Desde el alto de Otzaurte, accederemos al túnel de San Adrián, cueva natural que ha servido a lo largo de la historia como vía de acceso entre Gipuzkoa y Álava y donde está situada la ermita del mismo nombre. Por otra parte, hay numerosos yacimientos al aire libre, dólmenes, túmulos y monolitos, a los que hay que añadir un interesante patrimonio histórico-arquitectónico, representado por un buen número de ermitas, caseríos, etc., destacando el Santuario de Arantzazu y la propia villa de Oñati.